Gente que ha sonreido:

viernes, 18 de mayo de 2012

Extraña adicción

Como una partida de parchís que nunca acaba, como la peor de las adicciones existentes. Quieres parar pero no puedes, no puedes parar nada que nunca tuvo freno. Un turno que nunca llega, y si llega, no sabes si es el tuyo. No sabes cómo actuar ni qué decidir, no sabes si abandonar o seguir intentándolo un poco más. Nunca encuentras el seguro, y si lo encuentras, él ya está ahí. No quiere salir, no quiere arriesgarse; posiblemente esté pensando en guardar el tablero pero cabe la remota posibilidad de que esté pensando la jugada perfecta. No saber si lo mejor estando en un punto medio es arriesgarse a tenerlo todo o a quedarse con nada, sin saber si olvidarle es lo que realmente quieres sin arrepentirte de lo que un día hiciste y si es así, que se acabe ya para siempre, que tenga fin, pero ya nada volverá a ser como antes.Entonces es en ese momento cuando te das cuenta de que no quieres que sigan como siempre, quieres avanzar o que se acabe todo. Si estuviese convencido de que iba a perder, posiblemente hubiese guardado el tablero antes de que fuese demasiado evidente, pero claro, puede que le guste la partida.

martes, 8 de mayo de 2012

Que sí

Asume tus errores, se consecuente, borra las malas huellas del pasado y pisa firme este presente. Un día crees que lo tienes todo, que las razones para sonreír son suficientes, pero con la misma facilidad que llega todo, se va. Dar por hecho que nadie va a estar contigo en tu caída no es la solución. Lo más fácil es rendirse, darlo todo por perdido, es lo más fácil y lo más cobarde. El miedo a todo y a nada al mismo tiempo, grita y si crees que no te oyen no te rindas, grita más fuerte aún hasta quedarte sin voz. Es fácil decirlo, sí, pero también hay que estar convencido de que es fácil cumplirlo. Lo que un día se fue no volverá y se tiene que aceptar, hay que vivir con ello y no por ello. Seguir, buscar motivos por los que sonreír, por los que ser nosotros los dueños de nuestro tiempo y no el tiempo de nosotros.